Las enfermedades comunes afectan a millones de personas a nivel mundial y pueden variar desde condiciones respiratorias hasta enfermedades crónicas como la diabetes o las alergias.
Las alergias son reacciones del sistema inmunológico a sustancias que normalmente no causan daño, conocidas como alérgenos. Pueden afectar a personas de todas las edades en todo el mundo y se han convertido en un problema de salud pública creciente. Las alergias pueden ser de diversos tipos, como estacionales, alimentarias, cutáneas o respiratorias, y su prevalencia ha aumentado en las últimas décadas.
La diabetes es una enfermedad crónica que afecta la manera en que el cuerpo procesa el azúcar (glucosa). Existen dos tipos principales: tipo 1, donde el cuerpo no produce insulina, y tipo 2, donde el cuerpo no usa la insulina correctamente. Los síntomas incluyen sed excesiva, micción frecuente, fatiga y visión borrosa. Es importante controlar los niveles de azúcar en sangre con dieta, ejercicio y medicación.
La hipertensión o presión arterial alta es una condición en la que la fuerza de la sangre contra las paredes de las arterias es constantemente demasiado alta. Puede llevar a enfermedades graves como accidentes cerebrovasculares, ataques cardíacos y daño renal. A menudo, no presenta síntomas evidentes, por lo que es importante monitorear regularmente la presión arterial. El tratamiento incluye cambios en el estilo de vida, como la dieta, el ejercicio y medicamentos.